Livin Alone

Esta semana me volví metalera por un día, fue lo más divertido que he hecho en una salida con mis amigas. Todo comenzó hace aproximadamente una semana intentando organizar el día para vernos y poder ir todas. Al principio iríamos a una fiesta en Tepotzotlán, Estado de México, puebla mágico. (Visítenlo). El viernes por la noche Sam nos aviso que no podría ir a la fiesta en Tepo porque tendría partido al día siguiente y decidimos hacer otra cosa en la ciudad. Sandra nos comentó sobre el toquín de su amiga cerca de metro Normal y dijimos “que se arme”, total, un buen mexicano nunca raja. Invitamos a varias de las chavas que son fundadoras de Espartanas, el equipo donde nos conocimos y comenzamos a jugar fútbol americano. Esa historia se las contaré con mejor detalle en otra ocasión. Invitamos a Marevi, Fabiola, Diana, y las chicas que ya estábamos en el grupo (Sandra, Sam, Nancy, Dana y su servidora, Edna). Algunas no pudieron por ir a una cata de vinos con quesitos y otras porque no e

Todo comenzó el 24 de agosto, que fue el día que el individuo me dijo que las cosas ya no funcionaban y me cayo el balde de agua fría para despertarme. Las primeras personas a las que les avise sobre el suceso fueron mis padres, mis hermanos, mis hermanas y mi befi. No sabía que tenía que hacer, quería salir corriendo de la oficina donde hago mi servicio y ocultarme de la gente, quería reírme porque era libre, quería llorar mucho tiempo... Sólo hice una cosa: planear como era que me iba a salir de su casa, a donde iba a ir y como me iba a sustentar. ¿Cómo me iba a salir? Guardar todas mis cosas en cajas, moverlas a... fuck! tengo que moverlas a donde me voy a vivir... Sandra!! En ese momento entro una llamada de una de mis personas favoritas, una de mis hermanas postizas y me salvo la vida. Me menciono un cuarto en renta en casa de uno de sus amigos y le llame. Ya tenía donde quedarme.  Fue un miércoles el día en que terminamos, obviamente no tenía nada en que moverme, a donde irme,